1757 - Noche sin ti
Es la noche, sin ti, larga y desierta,
perdidos la fragancia, los rumores,
la desnudez, los íntimos temblores,
en este insomnio, infinitud despierta.
Miro al techo sin verle, y a la puerta,
como a la espera de que te incorpores
a esta mi soledad y la devores
a mordiscos de amor, y a mano experta.
Si llamara tu voz, la luz se haría
como al grito de Dios el primer día,
desertando esta noche de mi lado.
Si escuchara el crujido en la madera
de tu paso gentil, qué primavera
podría reventar en mi costado.
Los Angeles, 5 de octubre de 2007