190 - Raquel
Llegada la mañana, vió Jacob que era
Lía, y dijo a Labán:
‘¿Por qué me has hecho esto? ¿No te
he servido por Raquel?
¿Por qué me has engañado?’
(Génesis, 29: 25)
Por tí, Raquel, ha sido el sacrificio,
por tí veo pasar de siete en siete
los años a la espera, y me acomete
una ansiedad de tí, sin ejercicio.
Toda con la mirada te acaricio,
hasta esta noche oscura que promete
desenlace nupcial en el que apriete
tu vientre abierto sólo a mi servicio.
Y así ha sido...¿o no fue?...Qué desengaño
amanecer unido a un cuerpo extraño,
lejos de tí, sobre tu hermana Lía.
Oh Raquel, mi Raquel, tú has de esperarme,
porque dentro de tí he de derramarme
al final de estos años de agonía.
Los Angeles, 11 de mayo de 1999