1966 - Absurdo camino
No avanzo ya por el camino de antes,
el camino es autónomo y me lleva;
mi voluntad no cuenta, la releva
otro motor de impulsos apremiantes
que no está en mí, que rige los instantes
y la perpetuidad, sin que se atreva
la mente a protestar; ya nieve o llueva,
es la senda quien hace caminantes.
Yo no quiero ir a ti, pero mis pasos
no me obedecen; saben de fracasos
y no obstante patéticos se obstinan.
Oh qué camino absurdo, que a tu estancia
me propulsa, a pesar que la distancia
la mente y tu actitud me desaniman.
Los Angeles, 25 de septiembre de 2008