2041 - Frío
No estás aquí. Perdí la primavera,
y me abrazó el invierno de repente;
siempre es enero para el alma ausente,
que más se aflige cuanto más espera.
Porque esperar es, más que fe, quimera;
es admitir que el tiempo es la corriente
que volverá a pasar, aunque a la fuente
nunca regresa el agua viajera.
Ay, que este enero que a destiempo viene
no parece una tregua. Se detiene
como quien no reiniciará la marcha.
Largo bloque de hielo es este río
que ya no fluye, que me deja frío,
cubiertos piel y corazón de escarcha.
Los Angeles, 6 de marzo de 2009