2089 - Revelación
A mandobles de luz establecía
su propia creación. Yo era la nada,
nebulosa, neutral, deshabitada,
con alma de alquiler, que no sentía.
Dormida en mí la vida, yo existía;
como el rumor, como la bocanada
de ingrávido humo azul, o agua estancada,
y ella me hizo a su imagen, que es la mía.
Y procedí a vivir, con la pujanza
de quien forjara súbita alianza
con las nubes, la luz, las mariposas.
Ah, qué revelación efervescente,
rescatando sentidos, alma y mente
para ofrecerlos como un haz de rosas.
Los Angeles, 24 de abril de 2009