2158 - Universal abrazo
Se me alargan los brazos, y despliegan
progresiva, incesante curvatura,
titánica tenaza en envoltura
de todo un mundo al que en fervor se entregan.
Nadie se queda fuera; todos llegan
a gozar de su espacio en mi herradura
de sangre y fuego, júbilo y ternura,
mientras en vidas tan dispares bregan.
Hermano soy de todos, me comparto
con el débil y el fuerte; no me aparto
del exiguo, el burlado o el mendigo.
Se me ensanchan los brazos, sin fronteras,
como una inmensa red de carreteras,
y no reputo a nadie mi enemigo.
Los Angeles, 1 de agosto de 2009