2215 - Roto el dogal
Recordarás, mujer, tiempos lejanos,
antes de unir tus senos a los míos,
en lechos de hombres, páramos baldíos
de fuerza y prisas, e inexpertas manos.
Fueron los sueños, como el sexo, vanos,
y los afectos, por igual, vacíos;
las esperanzas eran como ríos
perdiéndose en atrofia de pantanos.
Rompimos el dogal, e independientes
ensayamos opciones que las gentes
anatematizaban sin saber.
Pero en nosotras una luz brillaba
que indefectible nos predestinaba
a un mañana de amar y estremecer.
Los Angeles, 22 de septiembre de 2009