2339 - Con todas las opciones
Hueles a bajamar y a rosaleda,
y en suavidad de espuma y de corola
te meces en la brisa, rama y ola,
cruz de aroma y salitre, añil y seda.
Soy peregrino en ti, que eres vereda
por donde va mi piel, desnuda y sola;
y en tu rubor en llamas de amapola
un arcángel impúdico se hospeda.
Eres visión carnal de San Antonio,
y yo aparezco, turbador demonio,
solicitando afable tu caída.
Mar y rosa, vereda y tentaciones,
ábrete a mí con todas las opciones
de un cuerpo en flor y un alma estremecida.
Los Angeles, 26 de marzo de 2010