2377 - Llegabas en la noche
Llegabas en la noche, y renacía
cuanto cansancio y tiempo habían muerto;
como si el eco mudo de un concierto
recobrara su prístina armonía.
Y en esa nueva, transformada orgía
de ritmos y cadencias, yo, despierto,
te soñaba real, vela en el puerto,
brisa en los olmos, luz de mediodía.
Llegabas en la noche, en rescisiones
de enojos, sequedad y decepciones,
restaurando mi estado primitivo.
Y me dejaste un alma que resuena
con temblor de cristal, vigor de almena,
de todo en libertad, de ti cautivo.
Madrid, 26 de mayo de 2010