2551 - Fragancia
Olfatea mi perro cada pieza
de indumentaria sobre mí, y archiva
en su íntimo fichero cada activa
emanación que capta su agudeza.
Cada volumen de su elenco empieza
por nombre, fecha y sitio, y en festiva
prosa canina frívolo cautiva
rasgos de júbilo, dolor, tristeza.
Hoy mi perro me acecha, me barrunta,
como si formulara una pregunta
sobre cierta fragancia un tiempo ausente.
Intenta averiguar qué ha sucedido
desde la última vez que ha percibido
tu aroma de mujer en mí presente.
Los Angeles, 14 de enero de 2011