2799 - Hueles a despedida
Hueles a despedida, agria fragancia
hija de lo aromático inactivo.
Al realizar nuestro quehacer festivo,
embalsamaba el sándalo la estancia.
Luego, trazando esquemas de distancia,
enrareciste el aire, y elusivo,
siendo empresa común, nuestro objetivo
fue perdiendo sentido y relevancia.
Siempre hay sabor amargo en la partida,
resabio de morder fruta podrida,
no en boca que se va, mas que se queda.
Ni reniego de ti, ni te detengo.
Cuanto tuve fue mío, y lo mantengo,
aun siendo tú lejana polvareda.
Los Angeles, 12 de noviembre de 2011