2843 - Hierro (II)
Son mis brazos parábola flotante,
cóncava súplica entre cielo y tierra
a la diosa Afrodita, cuya guerra
une y opone amante frente amante.
Te colgarás de mí, beligerante
mujer de sangre lúbrica, que encierra
en su entraña las fuerzas de la tierra,
sabiendo liberarlas al instante.
Madre de terremotos, que sacudes
mis íntimos pilares, tus virtudes
son mis vicios de pétalos vestidos.
Tiene mi abrazo solidez de hierro,
y cuando en él hermético te encierro,
se me desatan ímpetus prohibidos.
Los Angeles, 14 de diciembre de 2011