3066 - Destino
Es el destino fácil panacea
para justificar nuestros errores,
olvidando que somos creadores,
no consecuencias, de tan ciega idea.
Ni forja nuestras vidas ni moldea
su futuro; no tiene constructores
para llevar a cabo las labores
que sólo nuestra mente se plantea.
Al invocar su nombre, el perezoso
exculpa su apatía, y el medroso
se detiene al umbral de su impotencia
Impotente también es el destino.
Cada cual se programa su camino,
y a razón, mano y pie lo diligencia.
Los Angeles, 19 de octubre de 2012