318 - Hoy
Vengo de ayer, y traigo un cargamento
de nostálgicas lunas evasivas,
cómplices de fervientes tentativas,
de serena quietud, de atrevimiento.
Y de besos inéditos que intento
verter en oleadas sucesivas,
de antiguas ansias, nuevamente vivas,
de viejo impulso en renovado acento.
Yo soy de ayer, y tu eres de hoy; tenemos
la voluntad y el tiempo, si queremos;
¿qué diferencia puede hacer un día?
He de quedar en tu hoy, porque mañana
tiene una perspectiva muy lejana,
y no he de esperar más a hacerte mía.
Los Angeles, 26 de enero de 2000