3398 - Hermandad
Hermano soy de todo, de las cosas,
de la alondra y el mirlo, de la nieve,
de lo inmóvil, de aquello que se mueve,
del olmo en la ribera, de las rosas.
Hablo con ellos, y en sus primorosas
lenguas de aire o de tierra, me conmueve
su dialecto callado, estilo breve,
y espontáneas ideas luminosas.
Decir lo que se piensa, sin bullicio
de imprecisas palabras, qué ejercicio
de claridad mental, de exactitud.
Me han enseñado tanto en mi sendero
de hojarasca trivial, que ya no quiero
perturbar en voz alta su quietud.
Los Angeles, 20 de agosto de 2013