34 - Lamento del herido
Anónimo disparo ha interrumpido
Mi caminar sobre el cruel paisaje,
Y ahora emprendo un fatídico viaje
con el fondo del ánimo abatido.
Mi cuerpo pasará firme y erguido
Bajo el arco triunfal del homenaje,
disimulando el inhumano ultraje
que me ha de condenar luego al olvido.
Soy un peón, no más, en esta lucha
De incomprensible o falsa ideología,
Número frío, carne de cañón.
Soy una débil voz que nadie escucha,
Un siervo de la megalomanía
Que usa la fuerza cuando no hay razón.
Los Angeles, 18 de septiembre de 1997