3465 - Eyaculación
Tendido sobre mí, tu cuerpo flota,
sin peso apenas; soy cabalgadura
que sin bridas diriges, soy lectura
del poema de amor que entre ambos brota.
Abres mi libro, sorbes gota a gota
el néctar que destila, la frescura
de mis jóvenes años, y en anchura,
longitud y nivel mi piel explota.
No, todavía no, que aún no he llegado
a ese punto de vértigo alocado
en que mi tren completo descarrila.
Continúa adentrándote, y huyendo…
He aquí el instante ya. Ay, que el crescendo
de tus flujos vitales me aniquila.
Los Angeles, 5 de octubre de 2013