3578 - Copa
En lentitud la beberé, extrayendo
su furtivo mensaje gota a gota.
Me habla en lenguaje de águila o gaviota
prestándome alas, y a volar aprendo.
Ensayo en playas de oro, y en crescendo,
me encumbro a la altitud, ya compatriota
de excelsas nubes en quietud remota;
y continúo en languidez bebiendo.
El cuerpo se me ensancha, mas la mente
parece diluirse en un ambiente
de intangibilidad, o de nirvana.
Agotada la angélica bebida,
pliego las alas y, semidormida,
flota el alma en la nube más cercana.
Los Angeles, 23 de noviembre de 2013