3678 - Almohada
Aún mantiene el calor y la fragancia
de tu noche final, en que acogiste,
gentil, mi invitación, y enardeciste
de nuevo mis sentidos en la estancia.
Tanto tiempo me amaste… La distancia
ni aminora el deseo, ni se viste
la prenda del olvido, ni me asiste
en mi afán de asignarle irrelevancia.
Ni las horas, los días, o los meses
borran tu nombre, o crean intereses
que el alma juzgue dignos de aceptar.
Vivo contigo, mas sin ti, y abrazo
tu cuerpo de aire y luz en el regazo
de esta almohada en que estás, aun sin estar.
Los Angeles, 7 de enero de 2014