486 - Deshielo
Soledad que sin ser llamada llega,
en albergue de hielo nos ampara;
sólo el cálido sol dará en la cara
de quien libre a sí mismo se repliega.
Sobre tu piel la escarcha se congrega
en estratos anuales, y separa
tu oscuro mundo interno de la clara,
radiante luz que al exterior navega.
Cuando llamé tu nombre, el sentimiento,
tanto tiempo dormido, cobró aliento,
y en combustión saltaron tus sentidos.
¿Y mañana? Tal vez no habrá mañana,
pero hoy seré una inmensa caravana
trazando en ti infinitos recorridos.
Los Angeles, 9 de julio de 2001