525 - Sin pudor
Me llego a ti con ansias de tenerte,
y retrocedes, de temor vestida;
déjame desnudarte, que la vida
es, sin amor, figura de la muerte.
Viva yo un sueño del que no despierte,
con mi virilidad recia y erguida
en ti perennemente introducida,
que mi extracto vital sin cesar vierte.
Quédate sin pudor, timidez, dudas,
y mientras lentamente me desnudas,
yo lentamente te desnudaré.
Mirándote a los ojos, insistente,
mirándome en silencio que consiente,
me abrazarás y te desfloraré.
Cantabria, 18 de octubre de 2001