670 - Anya María, recién nacida
Mínima flor de carne sonrosada,
bajo la luz artificial tendida;
hoy reclamas derechos a la vida
que en un acto de amor te fue otorgada.
Ciega y muda al albor de tu jornada,
y en tu primer reposo sumergida,
una guirnalda en esta amanecida
sobre tu frente ha sido ya trenzada.
Corona de esperanzas y de gozos,
de sueños, sacrificios y sollozos,
llevándote de niña hacia mujer.
Se abren hoy ante ti tantas veredas…
Recórrelas feliz, no retrocedas,
y no dejes tu canto enmudecer.
Los Angeles, 5 de septiembre de 2002