807 - Vino en mi invierno
Vino a mí en el invierno, cuando callan
las aves, y se duermen los rumores;
cuando lo blanco apaga otros colores,
y en timidez los besos se amurallan.
Vino con manos de escultor, que tallan
cada línea del cuerpo, sin temores,
brazos abiertos, ojos soñadores
que como barcos en el alma encallan.
Era mi invierno, la estación sombría
que se ve transcurrir día tras día,
en silencio y quietud involuntarios.
Vino en mi invierno y me hizo primavera;
y hoy que se va, revertiré a la espera
de agotar mis escasos calendarios.
Los Angeles, 31 de mayo de 2003