929 - ¿A qué esperas?
Otoño es una fiesta de racimos
coronando a Dionisios y Bacantes,
es la sensualidad de los amantes
de juegos lúbricos a tenues mimos.
En este otoño que tú y yo vivimos,
de cíclicas vendimias fluctuantes,
también las rosas tienen sus instantes,
y nacen besos si lo permitimos.
No es triste páramo el lugar que habitas,
quizá olvidaste ya, tal vez dormitas;
no amanece si no abres el balcón.
Vale un otoño muchas primaveras,
enrolla las persianas, ¿a qué esperas?
Suenan campanas de celebración.
Los Angeles, 10 de noviembre de 2003