Brevería 1076
Aún no he visto tus ojos, tus párpados he visto,
telón impenetrable hasta sus pies caído;
su claridad opaca me conversa, y desisto
de mirar otros ojos o prestarles mi oído.
Cuando se abran y miren, y logre contemplarlos,
y su voz silenciosa me platique en directo,
ignoraré otros ojos, torpes para eclipsarlos,
pues tendrán el destello que, aún sin verlos, detecto.
julio de 2003