Brevería 1396
Mi sombra es casi tú; me va siguiendo
sin despegarse de mis pies, testigo
callado de mis actos; no me ofendo
de su acoso metódico conmigo;
la considero parte de mi atuendo,
sin afectar cuanto ejecuto y digo.
Y tú, como ella, ni huyes ni protestas,
impasible a preguntas y respuestas.
octubre de 2005