Brevería 1556
Yo debo hablar de mí; ¿quién me conoce
tan bien como yo pueda conocerme?
Sólo tal vez quien me dialoga en roce,
y a través de mis ojos logre verme.
Los demás no ven más que una silueta,
fantasean los rasgos, no los saben;
desestimo esa imagen incompleta,
ya me desacrediten o me alaben.
octubre de 2006