Brevería 1722
Quédate un poco más, aunque anochece;
¿no es bajo las estrellas titilantes
la hora preliminar de los amantes,
cuando el tul del pudor se desvanece?
Tejan tus manos sobre mí sedosas
túnica desenvuelta, transperente,
de desnudez, y junto a mi yacente
nos sorprendan auroras luminosas.
septiembre de 2007