Brevería 1871
Hiere mi espalda el peso de la roca
en duro ascenso hacia la abrupta cumbre,
cada vez que mi amor tu nombre invoca;
condenado me siento a esta costumbre,
de subir, y caer, y en nuevo intento,
fracasar otra vez, Sísifo amante,
derrotado al perder el cargamento
de esta ilusión que te halla tan distante.
junio de 2008