Brevería 2359
La primera sonrisa nos desvela
ese mundo de ensueño que anhelamos;
con la última sonrisa el alma vuela
llevándose este mundo que dejamos.
Este mundo, quebrándose en la entraña
de quien llora por dentro, y que lo envía
por esta laberíntica maraña
de la muerte, sirviéndonos de guía.
Ah, la sonrisa que regala un mundo
renovado y feliz al moribundo.
noviembre de 2010