Brevería 2477
Las calles están solas.
Llenas de gentes, sí, mas desoladas.
Vienen y van, como en el mar las olas,
insistentes, y desesperanzadas.
Es un querer llegar, y un retroceso,
y un volver a intentar, sin resultado.
Como llevar a flor de piel un beso,
que nunca es recibido, ni otorgado.
junio de 2011