Brevería 2568
Cuando en tus años grises, por fin, leas
los versos que por ti he dejado escritos,
si no huyen, humo azul, por chimeneas,
o arrastra el viento, pétalos marchitos;
si abres mis libros, pero no rastreas
el alma que te amó, que aún te habla a gritos,
ni ves la tuya, que trazó mi mano,
todo cuanto escribí, lo escribí en vano.
noviembre de 2011