Brevería 2623
Caminas los pasillos de mi casa
como si aquí vivieras. Y aquí habitas.
Nadie te ve, es tu espíritu que pasa,
que al mío propio entero se trasvasa,
y tus mágicas artes ejercitas.
Duermes conmigo, tan secretamente
que tu grito es silencio, y tu entusiasmo
discurre entre las sábanas, ferviente,
con los impulsos de la adolescente
que ha descubierto su mejor orgasmo.
enero de 2012