Brevería 2750
Te he bebido, mujer, copa o fontana,
vino añejo, agua clara en borboteo,
que me apaga la sed y el alma enciende.
Y ya vacía o seca, siempre mana
dentro de mí, elixir de mi deseo,
que a mis miembros y vísceras se extiende.
Nunca te irás, aunque decidas irte,
y tampoco sabría compartirte.
agosto de 2012