Brevería 979
Oh, si la luz de la mañana fuera
tibieza sensorial de ignota mano
en mi desnuda espalda viajera;
y en este claroscuro en que desgrano
mis horas solitarias, se ofreciera
en amalgama de animal y humano...
Qué voluntaria víctima sería
de tal asalto, tal galantería.
septiembre de 2002