Brevería 985
Persiste día a día ante mi espejo
el sueño de que me abra tu ventana,
y ver, al clarear de la mañana,
tu despertar desnudo en su reflejo.
Y tal vez logre, al extender la mano,
acariciar tu piel semidormida,
sintiéndola de nuevo estremecida
cual la sentí en un tiempo ya lejano.
septiembre de 2002