Breverías
2471
Te amo tanto, quizá, por no tenerte;
no te amara, tal vez, si fueras mía.
Qué triste, en realidad, es nuestra suerte,
oscilando entre fuga y agonía.
2472
No conocí el amor hasta muy tarde,
cuando apenas hay luz en el ocaso.
Ah, pero vino al fin, y brilla, y arde,
y no me quejo ya de su retraso.
2473
Ni sabía de ti, ni tú quién soy,
fue la casualidad que a ti me trajo,
mas por mi voluntad contigo voy.
Yo escogí, no el azar, con quién encajo.
2474
Me canso a veces de pensar; me canso
de caminos, de ríos, de ciudades;
de tanto realizar, de no hacer nada.
Pero sé refugiarme en el remanso
donde reposan mis intimidades,
en vida de fervor, mas retirada.
2475
Tengo el tacto, si tímido, ligero,
y lento, y torrencial, y cauteloso,
como quien tiene tanto y nada tiene.
Sentado en mi rincón, espero, espero
un perfil ágil, mágico, bulboso,
que caiga sobre mí y me desalmene.
Sonetos
2628 - Levántate
Levántate, y sal ya de tu guarida,
que la sombra es fatídica asesora;
toquen la luz tus ojos, y desflora
cada jardín primaveral. Dormida
en lecho de solaz yace la vida,
y estática su fuerza creadora;
tú eres el atabal, y ésta es la hora
de activar su potencia contenida.
Quien duerme, sueña, pero no consigue.
Sólo cuando a sí mismo se fustigue
impulsará la ciega maquinaria
que ejecuta el prodigio de los sueños.
Si no, será carpeta de diseños,
paisaje gris, estela funeraria.
Castilla, 24 de abril de 2011
2629 - Quedóse un tiempo
Llegó y se hizo la luz con su presencia,
poblándoseme el mundo de rumores,
mansa explosión de estrellas y de flores
bajo el velo gentil de mi inocencia.
Quedóse un tiempo, fe y efervescencia,
de violín a redoble de tambores.
Silenciados al fin sus ruiseñores,
me dio el súbito obsequio de la ausencia.
Mi brújula de pronto triturada,
me vi sin norte, el alma confinada
a las lúgubres zonas del olvido.
No extraño a quien robó mi primavera,
extraño a quien imaginé, y no era,
sino perfil de sueño adormecido.
Burgos, 25 de abril de 2011
2630 - Mi mejor deseo
No te deseo un sueño placentero
de cielo azul, lejanas tonadillas,
y rumor cristalino en las orillas
del errático arroyo viajero.
Te deseo el sombrío vertedero
de malaventuradas pesadillas,
en que la flojedad de tus rodillas
sea, más que atracción, despeñadero.
Y es que te quiero bien; pues despertando
de tu sueño en azul, vibrante o blando,
lamentarás su pérdida emotiva.
Mas despertar de lúgubre quimera
sería liberar la primavera
al fondo de tu espíritu cautiva.
Burgos, 27 de abril de 2011
2631 - Camino irreversible
De nuevo la encontré, y hablé con ella,
renaciendo sonrisa y confianza;
viejos recuerdos en vibrante danza
repitieron sus pies en cada huella.
No era instante de sombra o de querella,
arrinconadas ya broquel y lanza,
mas tampoco de utópica alianza,
muerta la original, remota estrella.
Oh, enredados paisajes de la mente:
Zona adversa, región ambivalente,
o al punto adepta a repetir el sueño.
Mas son irreversibles los caminos.
Continúen sus giros los molinos,
mi universo requiere otro diseño.
Burgos, 28 de abril de 2011
2632 - Liberaré al amor
He descendido al solitario foso
donde yace el amor encadenado;
y me he visto a mí mismo, alborozado
y abatido a la vez, manso y furioso.
Anhelante de tacto, minucioso
explorador del atlas encrespado
de la femineidad, soy el arado
pretendiendo labrar campo arcilloso.
Mi cosecha es de viento y polvareda.
¿En qué derrota mi ansiedad se enreda,
que mi arrojo no alcanza su corona?
Liberaré al amor de sus prisiones;
tal vez se restablezcan mis opciones
de amante que de nuevo se ilusiona.
Cantabria, 1 de mayo de 2011
2633 - Temor
Mi instinto habrá de amarte, o mi cabeza,
o este núcleo que gira en torbellino,
saltando de lo humano a lo divino,
de lo frenético a la gentileza.
Dramática inquietud, mas no certeza,
será mi galardón, que tal camino
no siempre aboca a lago cristalino,
sino que en roca súbita tropieza.
Este amor, como tantos, inseguro,
podrá abrir puertas, levantar un muro,
forzar el puño o extender la mano.
No sé qué alcanzaré, cuándo ni cómo.
Temo que si a tu espíritu me asomo
más que galán me besarás hermano.
Cantabria, 2 de mayo de 2011
2634 - No me ves, yo te veo
Por ti hay amanecer, por ti despierto
en sonrisas de espuma cada día;
por ti escucho serena melodía
de violines en mágico concierto.
Dejo mi desnudez al descubierto
de tu mirada, ciega compañía;
no me ves, yo te veo, qué baldía
presencia ambigua que yo solo advierto.
Pero estás. Casi me unzo a tu figura,
yugo común y lúbrica atadura,
rodando el carro de apremiante amor.
Ah, vigor de la mente enamorada,
creadora de mundos en que nada
se realiza, y es todo arrollador.
Cantabria, 3 de mayo de 2011
2635 - Solo y sin ti
Solo y sin ti; desalentado espero:
Pierdan fuerza los pies de cada hora.
Inicias el camino; se incorpora
mi fe a la acción, su ritmo es más ligero.
Te aproximas; percibo tu velero
sobre la azul sonrisa de la aurora.
Llegas, al fin, y el tiempo se evapora;
ya no hay reloj, y se borró el sendero.
Tu forma, elaborada por la mente,
cobra autenticidad, ya no es ausente
sombra o perfil, mas realidad tajante.
Es cuerpo y alma en cópula y abrazo,
exaltación del tacto, ramalazo
sobre cada sentido del amante.
Cantabria, 4 de mayo de 2011