Breverías
3176
La sensatez y la sabiduría
expresan la más alta y pura idea
con minúsculo empleo de lenguaje.
La necedad, en cambio, en una orgía
de palabras inútiles, airea
el concepto más simple en su mensaje.
3177
“Sólo sé que no sé nada”.
Pero Sócrates sabía
más que tantos conocemos.
La ignorancia no obcecada
puede ser camino y guía
hacia lo que aún no sabemos.
3178
Son muchos más los necios que los sabios.
Siendo tesis de la soberanía
el gobierno por simple mayoría…
(Pero esto no ha salido de mis labios.)
3179
Saber no es recordar, ni haber leído
libros de amplia temática o materia,
que no se han, a menudo, digerido.
No es memoria, aunque esté en la periferia.
Saber es percibir cada crujido
que la mente provoca, alegre o seria;
analizarlos y clasificarlos,
para, sobre la marcha, utilizarlos.
3180
Cuando el tigre mata al hombre
quisieras matar al tigre.
Cuando el hombre mata al tigre,
debieras matar al hombre.
Sonetos
3618 - Brindis
Por ti brindo, mujer, porque naciste;
alzo por ti mi copa y bebo el vino,
líquido misterioso, sibilino,
que rehabilita el corazón más triste.
Tal era el mío cuando tu viniste,
y tu carisma enderezó el camino
por el que iba sin brío ni destino,
y ahora sigo la luz que tú encendiste.
La que me lleva a ti, por ir contigo;
restablece mi fe si me fatigo,
e incita, y satisface, mi pasión
Reavivaste la llama en mi ceniza,
por donde voy, tu sombra se desliza,
y nace de tus labios mi canción.
Los Angeles, 10 de diciembre de 2013
3619 - Bronce
El cañón, la campana, la escultura,
hijos del bronce, tienen su manera
particular de hablarnos, ya guerrera,
solemne, o desde su épica estatura.
En voz ronca, el cañón, desde su oscura
posición camuflada, vocifera
su plan de destrucción; lúgubre fiera
que asalta y mata, pero no captura.
Con solemne reclamo, la campana
convoca multitudes, a cristiana
secular, o elegíaca asamblea.
La escultura es testigo de la historia,
ya cultural o militar, memoria
y ejemplo a secundar, acción o idea.
Los Angeles, 11 de diciembre de 2013
3620 - Bucólico
En la serenidad del bosque umbroso,
en la verde campiña, o a la orilla
del manso riachuelo, en el que brilla
un cielo tan azul, tan luminoso;
en tal paisaje pastoril, sedoso,
se fraguaron amores; y en la arcilla,
o el tronco del nogal, o en la sombrilla,
sigue hablando algún nombre soledoso.
Hubo ninfas un tiempo, en algazara
de ardor voluptuoso, que lograra
de los lúbricos faunos los favores.
Más tarde los ambientes pastoriles
más soñadores fueron, más gentiles,
y en églogas cantaron sus amores.
Los Angeles, 11 de diciembre de 2013
3621 - Buitre
Si el buitre fuera humano, tendería
a ejercer de político o banquero;
aunque no matan, hay un matadero,
que otros han fabricado, en cercanía.
Acorrala a quien yace en agonía,
y espera el desenlace; no es guerrero,
comerá los despojos, carroñero,
oportunista falto de osadía.
Los vi en la sordidez del tercer mundo,
merodeando al niño moribundo,
para arrancarle, al fallecer, la piel.
Como acechan al pobre infortunado,
haya o no en sus intentos fracasado,
quienes se ven a más alto nivel.
Los Angeles, 11 de diciembre de 2013
3622 - Burbuja
Tan delicada como beso al viento,
con carácter de soplo enamorado;
frágil, etérea, en cuyo puro estado
radica tu existencia de un momento.
Apenas tienes cuerpo, eres aliento
envuelto en piel traslúcida, y sellado
en globo tan sutil que habrá estallado
al mínimo contacto o movimiento.
Breve tu vida, tenue, vulnerable,
tal que el amor, juzgado perdurable,
mas, al primer revés, desvanecido.
Flota en tu ambiente, primorosa, leve,
y que tu esfera mágica se eleve
ajena a su minúsculo estallido.
Los Angeles, 11 de diciembre de 2013
3623 - Burdel
Sólo de tu sonrisa ataviada,
la que me ofreces, y que sé no es mía,
se vuelca sobre mí tu anatomía
en actitud, si abierta, delicada.
No eres amante, eres actriz, y nada
desentona en tu oficio, que me guía,
por senda que no es ya de fantasía,
tantas veces de paso transitada.
Sabes tan bien lo que tus hombres quieren
que no tienen que hablar; si algo prefieren
fuera de lo normal, para ti es arte.
Mas hay, no obstante, un aire de carencia,
de vacío y desierto, que la esencia
de tu placer es dar, pero no darte.
Los Angeles, 11 de diciembre de 2013
3624 - Burro
El caballo es orgullo, y elegancia;
se alía al poderío y la nobleza
por su brío en el campo, y su destreza;
su testa en alto peca de arrogancia.
Pero el asno es humilde. Su importancia
se cifra en cometidos de llaneza;
más cercano a la tierra, a la pobreza
de las clases plebeyas, sin prestancia.
Y sin embargo, en su remota historia,
épocas tuvo de esplendor, de gloria;
por el Hijo de Dios fue cabalgado.
En sus horas de inercia, reflexivo,
tal vez sonríe, al no hallar ofensivo
que el hombre llame burro a su allegado.
Los Angeles, 13 de diciembre de 2013
3625 - Buzón
Salías al buzón, con la esperanza
de hallar su carta, y uno y otro día
amargo desaliento descendía
sobre tu corazón, por la tardanza.
Siempre hay cierta tristeza en la añoranza;
se mira atrás, y el tiempo no se alía
a los propios deseos; en la fría,
gris soledad, la incertidumbre danza.
El correo electrónico aún no existe;
no hay teléfono a mano; sólo el triste,
vacío recorrido del cartero.
Ilusión de minutos, a la espera
de lo que nunca llega. Y persevera
tu ideal del distante caballero.
Los Angeles, 13 de diciembre de 2013