1292 - Entre sollozos
Me hablaste entre sollozos; qué impotencia
la mía tan fatídica; aunque ausente,
se me hizo la distancia transparente,
y te vi en el umbral de la dolencia;
mas sin poder tocarte; mi elocuencia
perdió el tono, el aplomo convincente,
sin ser capaz de establecer un puente
conductor del ramal de mi presencia.
Y fue tu llanto en soledad amarga,
de la adversaria soledad que alarga
el dolor sin apoyo de una mano.
Las más íntimas fibras se agitaron
en mi interior, mis ojos se inquietaron,
y yo también lloré, mi amor lejano.
Cataluña, 31 de mayo de 2005