1506 - Esta mutua verdad
La voz de tu soñar, la que me grita
desesperadamente, si despiertas,
al ver que van cerrándose las puertas,
antes de par en par a mi visita.
La voz de mis recuerdos, la que habita
tan al fondo del alma que no aciertas
a escuchar sus reclamos, sus ofertas,
aunque a través de mi actitud te invita.
Voces que se no se traban ni se trenzan,
dos líneas paralelas, que comienzan
en dirección precisa, y no se tocan.
¿Qué hacer para que captes mis clamores,
y vuelvas a los sueños forjadores
de esta mutua verdad que ellos provocan?
Los Angeles, 14 de junio de 2006