1801 - Erosión
¿Dónde estás hoy, mujer, que ayer me amaste?
¿En qué hondo pozo se ahoga tu promesa
de extenderte en los años? ¿Quién te besa
sobre el lecho al que un día me invitaste?
Eres de otro color, se alzó un contraste
entre aquélla que fue y ésta que expresa
tibiamente su amor; no fue sorpresa,
pero es dolor, y pérdida, y desgaste.
El templo que erigiste a mi persona,
mármol, al parecer, se desmorona;
tal vez fuera de adobe, o de ladrillo.
Lo que yo edifiqué, sigue inmutable;
piedra de sillería, formidable
desde el foso a la almena: Mi castillo.
Los Angeles, 7 de enero de 2008