1829 - Transformación
Como río de nubes que me anega
fluye de ti corriente luminosa,
de la mágica zona silenciosa
donde el sentir con el sentido juega.
Me penetra los poros, se despliega,
onda expansiva, en mi interior, se adosa
a sus muros desnudos, y reposa,
como el que al fin de su periplo llega.
Me transforma esa luz; vierte en mis dedos
otro estilo de tacto, y a mis miedos
les reviste de audacia y fortaleza.
Tal vez ese relámpago de amante
me equilibra en un punto equidistante
del ángulo del sexo a la cabeza.
Los Angeles, 14 de febrero de 2008