21 - Lamento de la Esposa
Nuestro amor fue un torrente de pasiones,
Un remanso de besos y ternura,
Pero el frío cruel de la amargura
Ha congelado nuestras relaciones.
Suenan gemidos donde oí canciones,
Veo abandono donde vi dulzura,
Y en la niebla de triste desventura
Vagan perdidos ambos corazones.
Tus labios se alejaron de mi boca,
Mis pechos no recuerdan ya tus manos,
Y mis brazos son huérfanos sin tí.
No me penetra ya tu furia loca,
Y al ver que en tí son mis deseos vanos,
Si alguien se ofrece, le diré que sí.
Los Angeles, 18 de agosto de 1997