2223 - Equis
Atada de muñecas y tobillos,
tú, cruz de San Andrés, equis gigante,
intersección de rutas, y yo andante
legión de ciegos, mas sin lazarillos.
Sólo me guía el tacto, y mis nudillos
aldabean tus puertas; caminante
voy por tu piel, no sé si mendicante
o de amor rebosando los bolsillos.
Pugnas por deshacerte de los lazos,
suplicas libertad, pero a zarpazos
de blanda intimidad te tiranizo.
De pronto eres la cera derretida
resbalando en la vela, y enseguida
soy sobre ti terreno movedizo.
Los Angeles, 4 de octubre de 2009