2248 - Reinventándote
Debo reconstruirte, o reinventarte,
infundiéndote el alma que fingiste,
cederte ideas que jamás tejiste,
y refinar tu apreciación del arte.
Al sumergirme en ti, logré explorarte,
mas no en profundidad, que no tuviste,
mujer de superficies; sólo diste
sueños que me forjé, tal fue mi parte.
Tal vez al fabricarte a mi manera
repetiré el error que cometiera
concibiéndote afín a mis anhelos.
Mas prefiero de nuevo equivocarme,
tropezar, y quizás ensangrentarme,
a rodar indolente por los suelos.
Los Angeles, 10 de noviembre de 2009