2820 - Mar y mujer (III)
Te hablaría de amor, si me escuchara
ese alma tuya, que al dolor se aferra;
o del terrible juego de la guerra
que hace el amante infiel que se separa;
del alborozo, a veces algazara,
que el mero intento de alcanzar encierra;
o que por cada opción que se te cierra,
otra mejor opción se te declara.
Mas nada te diré, porque, si herida,
de sombras y silencio irás vestida,
y no habrá voz que tu pesar suavice.
Sólo el mar, en rumor, en balanceo,
en vaivén de incesante galanteo,
te hablará, y no sabrás lo que te dice.
Los Angeles, 25 de noviembre de 2011