435 - Ultimos momentos
Luz temblorosa, luz agonizante,
resplandeciente ayer, hoy parpadeo;
te esperan tu corona y tu trofeo,
y concluye tu gira itinerante.
Sólo un instante queda de ese instante
que es la vida, esperanza y ajetreo;
ya tocan las campanas a voleo,
ya llegas a tu puerto, navegante.
Los claros ojos son un mar en calma,
mientras bracea por volar el alma,
dejando por lo eterno lo fugaz.
El Dios que te llamó y al que has servido,
ya preparado tiene el dulce nido
en que por fin descansarás en paz.
Madrid, 12 de abril de 2001