833 - Sacrificio
Hoy a los dioses me alzo en oraciones,
al dios del sentimiento, al del sentido,
al dios del buen placer, y del prohibido,
al del sosiego y de las vibraciones.
Sobre el altar, en tibias erupciones
de volutas de incienso adormecido,
inmolaré una víctima de olvido,
desangrando abandono y transgresiones.
Ascenderá el olor del sacrificio
hasta el lúbrico Olimpo, y un bullicio
de dioses en revuelo crecerá.
Tal vez en un relámpago me envíen
la señal de que atienden y sonríen...
tal vez ella de nuevo me amará.
Los Angeles, 17 de julio de 2003