Brevería 1861
Se me suicida el corazón; no quiere
proseguir repitiendo sus latidos;
tan pesada es la carga de descuidos,
de repudios, de olvido, que se muere.
Tanto se remozó, tal fortaleza
supo adquirir por el amor reciente,
que al perder, envejece de repente,
e intenta detenerse en su tristeza.
junio de 2008