Brevería 1178
Algún día te irás, mas no del todo;
te irás como se aleja el peregrino,
perdiéndose su sombra en el recodo,
pero quedando intacto su camino,
y sus huellas, impresas en el lodo,
y ambos nombres grabados en el pino.
Te irás como una lágrima furtiva,
que no por irse deja de estar viva.
1030 - Recuerda que soy yo
Has venido a través de las auroras,
y a través de los valles has venido,
ni río, bosque, o mar te ha detenido,
tú, que al pasar, cada rosal desfloras.
Deténgase la rueda de las horas
en tu reloj y el mío; en mí sumido,
hazme olvidar mi nombre y apellido,
y sólo recordar que me enamoras.
Para ir a ti desarrollé mis alas,
pero viniste a mí, y en mí te instalas,
irreprimible soy a tu reclamo.
Por ti abjuré de todo, en ti me obstino;
si no soy más que un alto en tu camino,
recuerda que soy yo la que te amo.
Los Angeles, 31 de enero de 2004